Una combinación entre experiencia y juventud caracteriza a las selecciones nacionales de triatlón que representarán a Costa Rica en los próximos Juegos Centroamericanos 2022, los cuales se realizarán en el Paseo de los Turistas, en Puntarenas. El 12 de noviembre será la prueba individual y al día siguiente se disputará la carrera de relevos mixtos.
El combinado femenino está compuesto por Raquel Solís (23), Alia Cardinale (36), Catalina Torres (24) y Maripaz Bogantes (16), mientras en masculino encabeza el grupo Álvaro Campos (22), acompañado de Pablo Herrera (29), Allan Naranjo (19) y David Alvarado (23).
Antes del Triatlón Urbano de Turrialba faltaban por definir tres plazas del grupo femenino, las cuales quedaron en manos de Cardinale, Torres y Bogantes, tres atletas con historias y momentos muy diferentes. Del otro lado, Campos, Herrera y Naranjo ya tenían su lugar, mientras Alvarado se dejó el otro espacio por criterio técnico.
Los Juegos Centroamericanos se disputarán en sede compartida, del 27 de octubre al 5 de noviembre en Guatemala, y del 7 al 14 en suelo nacional, por lo que el triatlón es una de las últimas disciplinas en competencia. Para Costa Rica será la defensa del oro en mujeres, mientras en hombres el país irá a recuperar ese lugar de privilegio.
Cardinale es la actual campeona, tanto del 2017 como en 2013, y aunque su regreso a estas justas se veía casi imposible, la sancarleña decidió “hacer un paréntesis”, como ella mismo lo describe.
“Esto no quiere decir que estoy saliendo del retiro, porque mi carrera como élite finalizó en 2018. Después del Campeonato Nacional en Golfito se me acercaron algunas personas a decirme que por qué no lo intentaba, en ese momento dije que no, pero después la idea me empezó a dar vueltas en la cabeza”, explicó.
Si Alia volvía quería hacerlo para ganar, como lo hizo anteriormente, aunque esta posición también cambió.
“Al ser entrenadora y tener chicos en formación, siempre les paso diciendo que lo más importante es el máximo esfuerzo, el proceso; las medallas y trofeos no son tan importantes. Entonces les estoy diciendo algo que no estaba aplicando en ese momento, ahí me empecé a motivar un poco”.
Entre la felicidad y algo de preocupación para acomodar su trabajo con más horas de entrenamiento, aceptó la responsabilidad con su característica de siempre: “Lo voy a hacer con toda la seriedad del caso (…) Parte de los objetivos es transmitir lo que sé y lo que he aprendido”.
La favorita, asegura, es Raquel, quien es la máxima representante del triatlón nacional y en Managua 2017 ganó la plata. Al lado de ellas estarán Torres y Bogantes, dos debutantes en pruebas de este tipo.
“Catalina para muchos fue una sorpresa pero para mí no, porque yo me puse a ver los resultados en Campeonato Nacional y vi una chica que se nota que es nadadora. Lo bueno es que nada super bien, en este momento eso es muy importante. Para Maripaz será toda una experiencia, es demasiado joven”, mencionó Cardinale.
Aunque para Alia no fue sorpresa, para Catalina y su entrenador, que además es su papá, sí fue algo inesperado.
“Estábamos entrenando para eso, pero uno jamás se imagina entrar de una vez a una selección tan grande”, explicó Torres, quien ya ha representado a Costa Rica en eventos internacionales de natación. Hace unos años dejó esa disciplina y en 2020 se enroló en el triatlón.
“Soy la que más puede aprender de ellas, será muy bonito porque al final estamos compitiendo entre nosotras pero somos un equipo, estamos buscando la mayor cantidad de medallas para el país. Será bonito vivir la selección de triatlón, aprender bastante, eso es lo que más voy a hacer. Aprender de la juventud también de Maripaz. No las conozco y nunca les he hablado”.
En el equipo masculino el aspirante al oro es Álvaro Campos. El brumoso tiene recorrido en competencias internacionales, pero estos serán sus primeros Juegos Centroamericanos, el primer paso del ciclo olímpico. En el 2017 Costa Rica se dejó la medalla de plata con Pablo Herrera, por lo que ahora la misión es volver al primer lugar.
“De mi parte, pretendo, espero, y quiero ganarlos, pero al mismo tiempo deseo que al equipo le vaya bien. Si puedo ganarlos y que Pablo quede segundo o quien sea, o inclusive poder hacer el podio completo estaría bien. Si alguna estrategia nos puede llevar a ese objetivo colectivo, que sea para el beneficio de todos”.
Competir en el país aumenta la presión, reconoce Álvaro, pero al mismo tiempo la motivación, deseando que la afición esté en todo el recorrido.
“Eso tiene un valor agregado y poder plasmar bien todo ese proceso que por dicha ha ido saliendo muy bien. Será un tri rápido, como será sprint, y sin duda, muy caliente. El ciclismo es rápido, tiene un componente técnico al final de cada vuelta. En un escenario donde estemos tres o cuatro de Costa Rica, me da la impresión que los chicos de la región no manejan tan bien los circuitos técnicos y nosotros sí, puede ser un punto a favor”.
El domingo 13 de noviembre, previo a los relevos centroamericanos se disputará la prueba de relevos a nivel nacional, abierta a cualquier persona que desee inscribirse, por lo que será una oportunidad para practicar triatlón y luego apoyar a Costa Rica. Los detalles se darán próximamente.
